Turns to 40's

Turns to 40's

jueves, 19 de febrero de 2015

Ricardo Arjona y su señora de las cuatro décadas

Antes de que lean esta entrada les pido no elevar sus expectativas... Pensemos en este escrito como algo "in between"... como un paper hecho mientras sale el otro... es mi paréntesis.

En mi entrada anterior, a propósito de este blog, mencioné a Ricardo Arjona en alusión directa a su canción… “Señora de las cuatro décadas”… ¿La recuerdan?

Señora de las cuatro décadas y pisadas de fuego al andar (¡será por los juanetes!)

Su figura ya no es la de los quince, pero el tiempo no sabe marchitar ese toque sensual y esa fuerza volcánica de su mirar. (¡ay, ay, ay! ¡hasta se emociona uno!)

Señora de las cuatro décadas, permítame descubrir que hay detrás de esos hilos de plata (en una de esas mi cráneo mi’jito)

Y esa grasa abdominal, que los aeróbicos no saben quitar. (¿Neta? ¡Pues más grasa maestro! Y si le buscas vas a encontrarme las vísceras… ¿Quieres ver el video de la cesárea de mi hijo? BTW, ya nadie dice aeróbicos... hoy es de crossfit pa´rriba)

Señora, no le quite años a su vida, póngale vida a los años que es mejor. (zzzz, zzzz, zzzz)

Porque nótelo usted, al hacer el amor siente las mismas cosquillas que sintió hace mucho más de veinte. (Este wey claramente no sabía ni de que hablaba… ¡si yo sintiera las mismas cosquillas ya me hubiera ido a una ermita o de plano ya me hubiera dado un tiro! -¿Las mismas cosquillas? Esas déjenselas a las preparatorianas… acá las de casi cuarenta solo podemos sentir… que volamos entre el fuego)

Nótelo así de repente, es usted amalgama perfecta entre experiencia y juventud. (¡Eso sí!, eso que ni qué)

Señora de las cuatro décadas usted no necesita enseñar su figura detrás de un escote (no necesito, pero porque puedo, ¡quiero! ¿¡cómo de que no!?)

Su talento está en manejar con más cuidado el arte de amar. (¿De qué hablas? ¿Con más cuidado? El amor a mi familia y a mí misma me ha dado el talento es levantarme aún con sueño y sin pensarlo, para tender la cama, prender el boiler, meterme a bañar, arreglarme hasta el perfume, hacer de desayunar riquísimo y sano, y recoger la cocina ¡en menos de una hora! Todo perfecto, todo a la primera y sumiendo la panza… ¿quiubo?)

Señora de las cuatro décadas no insista en regresar a los 30 con sus 40 y tantos encima, deja huellas por dónde camina, que la hacen dueña de cualquier lugar. (Pa que te digo que no, sí sí.)

Como sueño con usted señora, ¡imagínese! que no hablo de otra cosa que no sea de usted (¿léete un libro mano! Aunque sea el de las 50 sombras… ya de perdis.)

¿Qué es lo que tengo que hacer señora para ver si se enamora de este 10 años menor? (En la boca no, porque me enamoró jajajaja… no te preocupes mi’jito, si no es conmigo es con cualquier otra… cougars, ¡hay miles!)

Arjona... mejor cántame la de ¡Mujeres! o ya de pérdida la de la historia del taxi... ¡esa si es un rolón!

miércoles, 11 de febrero de 2015

Na na nara ná! ¿Qué canción es?

No crean que este blog se escribe de una sentada frente a la computadora. Este blog se compone de líneas que se piensan, se viven, y se transforman. Se compone de los detalles armónicos y caóticos que tiene la vida con la finalidad de concluir, de tener moralejas y fluir.

Explicadas ya dichas andanzas se entiende porqué últimamente he andado con los ojos más abiertos pero también más absorta en mis pensamientos. Nunca me había pasado que la gente hablara y yo no escuchara. Suelo ser una gran receptora, pero estos días han sido de introspección. De observar y trabajar. De sacar el teléfono móvil en donde sea que me encuentre para apuntar las ideas que llegan a mi ajetreado tren.

Así fue como me acordé de la frase esta de que la vida empieza a los cuarenta.

¡¿AAAAH CHINGÁ?! ¿Y entonces todo lo que he pasado que fue? ¿Un ensayo? ¡NO ME CHIN, NO ME JO!

Tratando de encontrar sentido a la frase, recordé también el asunto este que dicen que el cuarenta es un número cabalístico. Para no quedarme con la duda, tuve que hacer una mini investigación al respecto.

Resulta que cuarenta son los naipes de las barajas españolas. Jesucristo ayunó durante cuarenta días. Moisés permaneció cuarenta días en el desierto y el pueblo liberado deambuló cuarenta años en busca de la Tierra Prometida. Elías el profeta, permaneció cuarenta días sin comer recorriendo los caminos que lo llevaban al Monte Hureb. La escala de Job hacia el cielo tenía cuarenta peldaños. Jesús estuvo sepultado durante cuarenta horas y subió al cielo cuarenta días después de su resurrección.

Pa´pronto y pa´que mejor me entiendan; en general, (y por lo visto) el número 40 significa penitencia. *Ojo Cuadrado* *Cara de palo* *Se queda pendeja*

¡CON RAZÓN UNO VIVE ATERRADO DE LLEGAR AL CUARTO PISO!

Quiero desmenuzar… si la Cábala es la Interpretación mística y alegórica del Antiguo Testamento propia de la tradición judía que pretende revelar un saber oculto acerca de Dios y del mundo; o bien, una suposición o cálculo tomado a partir de datos incompletos o de indicios; sin ningún afán ofensivo, la cábala no deja de ser la interpretación de algo místico hecha por el hombre.

Entiendo que hay datos que se relacionan y “concatenan” de manera interesante y que incluso cuando nos los explican, hacen sentido, como por ejemplo el asunto de los cierres de ciclo cada siete años o el ya famoso 11:11 para los deseos o bendiciones. Conozco mil historias que inician con un “yo, a los 21 años”; mismas que nos hacen asumir que lo cabalístico existe y trasciende. Nos gusta creer que el destino acomoda las cosas para que hoy por hoy seamos quienes somos, y ocupemos el lugar que ocupamos. Nos gusta el misterio (más si somos mujeres), nos gusta suponer.

Pero dejando de lado un poco The twilight zone, no creo que en mi vida los cuarenta signifiquen penitencia, (de hecho, he pecado de pasármela bien) pero sin duda, como los de cualquier otro, significan camino andado.

Los cuarenta son señal de que hemos vivido ya media vida. Middle age (que le llaman)y que te aproximan a la segunda parte de tu vida. Eso es a mi juicio, el motivo que origina la frase motivacional que mencioné arriba, entre otras como “los cuarenta son los nuevos treintas”, e incluso la única canción buena de Arjona.

Hay otra frase que también me ha rondado la mente. Fue acuñada por mi abue… “Ya mero me voy, tengo 88 y me queda tanto por hacer…” a los dos días dejó este mundo.

Si por ella hubiera sido, se habría levantado para gritar con toda la fuerza que emanó en cada segundo de sus días la frase de “¡LA VIDA EMPIEZA A LOS 88!” y se hubiese ido a Liverpool a comprar ropa y de ahí a su cocina para hacernos mole. Y eso que los ochenta y ocho no son cabalísticos…

La vida antes de los cuarenta, no es un ensayo... la vida es vida desde que empieza y uno se sujeta a ella como al palito de la paleta cuando ya no queda nada de ella.

Life is life!


Nos leemos pronto.

sábado, 24 de enero de 2015

¡Yo todavía soy treintona!

Ser mamá de un niño de un año cinco meses, me llevó a una anhelada ladies night con mamás de niños de la misma edad. Lo curioso es que la edad estándar de los críos no estandariza la edad de las mamás… en términos llanos, era yo la más ruquita de la mesa.

Sí. Estaba yo sentada con mujeres de entre 32 y 36. De hecho llevo sentada con ellas en un salón de estimulación oportuna por más de un año y nunca se había tocado el tema de la edad tan puntualmente. Cada quien tuvo su turno. Yo tengo 32 dijo la primera, la segunda 35, la tercera 36, la cuarta 35 y la quinta 33. La sexta era yo, era mi momento... ¡GULP! *traga saliva*. Tomando aire dije, pues yo este año cumplo 40. Acto seguido se escuchó un amable: "cero se te notan". (¡ay, ajá!)

En fin, me di cuenta que decir tu edad cuando estás en un grupo de pura contemporánea, no es ningún acto heroico. Valiente, es el hecho de estar entre pura treintona y decirles, quítense que ahí les voy. Lo bueno fue que seguidito del trago amargo, un buen amigo se acercó para aligerar la carga… ¡Hello whisky!

Después del exabrupto flui sin tomar en cuenta las edades y alegremente la escapadita resultó exitosa. Y es que en honor a la verdad, la diferencia de edad hoy por hoy no se nota pues existen actividades y situaciones comunes que hacen que se acorten las distancias. Por supuesto que a los dieciocho no tienes amigas de once, pero a los treinta y nueve un whiskito cafecito con las de treinta y dos es bienvenido.

Lo que yo concluí después de escuchar que no se me notaban los “casi40”, es que SI se notan pero NO se sienten. No los sientes tú, no los sienten tus amigos, ni tu pareja, ni tus padres. Claro que lo interesante sería preguntárselo a tu hijo.

Una vez acompañé a mi mamá al doctor. Cuando respondió –cuarenta y dos años, doctor- a la irreverente pregunta de ¿qué edad tiene?, ¡sentí que me infartaba! Pero imagínense lo que sintió mi mamá al ver mi cara y escucharme gritar con ojos desorbitados delante del doctor -¿CUARENTA Y DOS…?-

Bueno, pues el tiempo pasa y ahora que acaricio las cuatro décadas me imagino gritando ese mítico número con cara de sorpresa y ojos desorbitados. Luego pienso que parece que fue ayer que estaba en mis dulces dieciséis y entonces me pregunto si el problema de los 5, de los 10, de los 15, de los 21,… es que todos “parece que fueron ayer”. Puede ser.

Pero vayámonos con calma, el día de la cena debí decir “yo tengo 39” y no andar de bocafloja. A mi me faltan ocho largos meses para seguir disfrutando de mis últimos días como treintona, y tengo que hacerlo como requisito indispensable para bienvenir los segundos tas… y los que vengan.

El miércoles pasado, Juan Pablo y yo veíamos Backyardigans, mi caricatura favorita. Después de la maravillosa entrada de los personajes animados bailando mejor que en “So You Think You Can Dance”, escuchamos el nombre del capítulo: ¡Salva el día! Me hubiera encantado quedarme a ver el capítulo completo, pero por obvias razones no pude. Lo bueno fue que mi cabeza grabó durante todo el día ese bonito título ¡Salva el día! Lo primero que vino a mi mente fue el mejor quote de una de mis películas favoritas. Carpe Diem de La Sociedad de los Poetas Muertos, ¿se acuerdan? solo que la frase procedente de la caricatura, por alguna extraña razón hoy a mis treinta y nueve me hizo tanto o más sentido que cuando vi por primera vez la peli del muy querido Robin Williams. Oh Capitain, my Capitain!

Pues bien, eso hay que hacer. Salvar el día. Salvar estos 8 meses treinteando como se debe, y de paso preparando el terreno para cuando Juanpi se entere de que por poco, en lugar de mamá iba a tener abuela.

Sí, se trata del Carpe Diem. “Cosecha el día”. Aprovecha el tiempo y no lo malgastes; no dejes para mañana lo que puedes hacer hoy. Pero a mi ritmo, prefiero salvar el día y no dejar que se me vaya vivo uno solo. Aunque procrastine. Puedo dejar para mañana lo que por desidia no hice hoy, no importa. Lo que me importa es lograr distinguir un día de otro.

Lola, ¡Salva el día! Que no se muera sin hacerle saber que su tiempo de vida valió la pena. Ayúdate a distinguir el ayer del antier y del anteantier. No dejes que toda tu vida parezca que fue ayer. Otórgale tiempo al tiempo. Clasifícalo, valóralo, recuérdalo. Aprende a vivir en el presente dándole el justo valor al pasado que ya no es, pero que fue perfecto. Y así cada día y cada año transcurrido dejarán de parecer que fueron ayer y entonces comprenderás que tu edad (la que sea que vivas) ha transcurrido puntualmente. A tiempo… En tiempo.

lunes, 12 de enero de 2015

Turning 40.... ENERO

Ayer 10 de enero de 2015, fui a los quince años de la sobrina de una de mis comadres de vida... Cuando mi esposo me preguntó que si conocía a la quinceañera mi respuesta me sorprendió... "La conozco desde la panza". Esas mismas cavilaciones hice con mis comadres cuando llegué a la fiesta; y ya entradas en añoranzas y tristezas de vejez, una de ellas me dijo que el próximo miércoles cumple 38 y que se sentía rarísima, triste, impresionada, en shock. Para aligerarle la carga le dije que yo cumplo 40 en septiembre. Me peló los ojos y me preguntó ¿ya este año? Si, le dije... Las preguntas no se hicieron esperar... ¿cómo te sientes, qué pasa por tu mente, no te sientes terriblemente mal? Si, le dije... Siento que es el primer paso a la vejez, siento que no lo creo, siento que sigo teniendo 25, siento que no es lo mismo estar a punto de los 30 que a punto de los 40, siento que me duelen las rodillas, siento que si subo de peso no puedo respirar, siento que bajar de peso no solo es vanidad sino una maldita obligación y siento que definitivamente los 40 NO SON LOS NUEVOS 30s.... En palabras y pensamientos llanos, sin filosofar, siento que los 40 no dan motivo para celebrar... ¡PERO! (Si Dios me deja llegar) los 40 también tienen una característica peculiar: Son inevitables. Durante el trayecto a una reciente reunión decembrina, iba haciendo una reflexión sobre mi outfit, incluyendo el perfume cuya marca era Lancôme. Pensé que iba vestida perfectamente igual a mis tías (hasta el aroma). Entonces completé mis pensamientos con una exclamación "¡soy una tía! ¡Soy una mamá! Y honestamente, lejos de sentirme completamente rara, me sentí bien. La verdad es que eso de la edad sorprende y hasta cala, pero en mi caso solo es cuando lo pienso porque mi día a día no transcurre con la angustia de llegar al 4o piso; aunque sí es un tema recurrente porque obviamente muchas de mis amigas llegamos a la mítica edad esté año. Justamente hace unos días en uno de mis grupos de whatsapp con mis amigas de prepa, les decía que el grupo debía dedicarse a echar porras para andar el camino que nos llevará a los 40. Luego escribí, "hay que llegar a los 40 de una pieza" a lo que una de mis amigas contestó "¡yo ya llegué de una pieza y redonda!" Jajaja me mató de risa... Lo que ya no aclaré es que no me refería a llegar de una pieza o forma geométrica específica, me refería a unir en una pieza tres elementos: MENTE, CORAZÓN Y ESPÍRITU; es decir, ser coherentes con nuestros pensamientos, sentimientos y manera de ejecutarlos. Hay que llegar sintiéndose contentas de lo que somos e incluso de lo que no somos. Hay que llegar exigiéndonos dar lo que podemos dar y hacer lo que podemos hacer.... La cosa es no llegar sentadas. Hay que llegar grandiosas, espléndidas... Vaya, hay que llegar con nuestros cuarenta comiendo de nuestra mano. Dominándolos, amándolos, consintiéndolos, domésticandolos... La edad es un estado mental, pero los 40's son tan reales como los 20's. Suceden. Y exigen de uno lo mismo que un padre a un niño con las calificaciones. Los 40 te exigen lo mejor de ti y no es tarea fácil. Por eso se deben recibir con deleite, con fuerza. En términos taurinos, diría que hay que recibir los 40 en Porta Gayola (el torero espera al toro de rodillas enfrente de la puerta de toriles, antes de que el animal salga al ruedo, y cuando se produce la embestida, la burla mediante el pase de capa conocido como larga cambiada afarolada, en el cual el capote sujeto únicamente con una mano, se sitúa por encima del diestro, dirigiendo la parte del envés hacia el toro, el cual sale del encuentro por el lado contrario a la mano con la que el torero sujeta la capa) Esta suerte es espectacular, pero también peligrosa, pues el animal puede salir deslumbrado a la plaza y arrollar o cornear al torero sin obedecer al engaño... ¿Se entiende la comparación? Creo qué luego por eso vemos cuarentonas vestidas de quinceañeras y no queremos que sea el caso. En fin, que me decidí a reanudar mi blog ahora con este tema... Pues los cuarenta, al menos los míos, siento que tienen mucho que decir. Nos leemos pronto.

jueves, 1 de noviembre de 2012

Calaverita para Víctor Gordoa G.

Por las calles de la roma se veía a lo lejos una señora de sombrero y buen talante, daba la percepción de ser amable, y como parecía extraviada, la gente se acercaba a preguntarle: ¿Que busca usted señora, en que podemos ayudarle? Haciendo gala de su estilo, la mujer dramática miraba por encima del hombro a quien se le acercaba y con tono elegante esto fue lo que les dijo: Busco el número 56 de la calle de Colima, que estoy necesitada de una consultoría. Con las indicaciones de los transeúntes llegó por fin a su destino y calladita calladita se coló hasta arriba con todo y su vestido. Señorita atiéndame que tengo cita con el más guapo de los Gordoa ¿Álvaro señora? Le preguntaron ¿No mi’jita! con el más guapo y madurito, quien según me dijo, ya tiene mi Plan Maestro. Ante el escándalo el Dr. Gordoa salió de su oficina y al ver a la flaquita con amabilidad le dijo: Pásele señora, ya le tengo su encarguito. Entraron y la mujer se quitó el sombrero, y pasó en un rato del estilo dramático al embustero Óigame bien Dr. Gordoa, que el Plan Maestro no es el que usted hizo sino el que traigo conmigo, así que póngase catrín que ya merito nos vamos, pero antes necesito un consejito. No se si sea mi imagen física o la no verbal, pero figurese usted que cada que me aparezco hago a la gente llorar. Usted es perfectamente coherente Doña Catrina, no tiene nada que modificar su misión es hacer llorar hasta al más valiente sin dudar. Le gustó tanto la respuesta a la catrina que tomo del brazo a Víctor quien se lo dio si chistar y al puro estilo dramático se fueron al camposanto que todavía había muchos consejos que dar.

miércoles, 26 de septiembre de 2012

26 de septiembre de 2012

Lo difícil del día de hoy, empezó a las doce de la noche pues decidí hablarle a mi hermana para felicitarla y ser la primerita… Difícil porque a pesar de hacer facetime, las ganas de estar, nunca se quitan… Ella contestó y llanamente dije, ¡Feliz cumpleaños! Pero cambié el tema de inmediato porque sabía que si entraba en detalles la felicitación podía volverse tortuosa… En realidad lo que quería hacer era gritarle ¡FELICES TREINTA HERMANA! ¡BIENVENIDA AL TERCER PISO!! Pero no me atreví… quizás porque con el entusiasmo corría el riesgo de apachurrar muy fuerte mi ipad, sientiendo que el abrazo era para ella, o quizás como ya dije, porque sabía que al decir esas palabras, mágicamente empezaríamos a llorar. Sin embargo tengo el don de la palabra escrita y eso Joahnita es lo que te ofrezco. ¡FELICES TREINTA HERMANA!! ¡¡BIENVENIDA AL TERCER PISO!! Te deseo el mayor éxito del mundo y la sabiduría que dan los primeros “tas” para vivir a plenitud. Te conozco asertiva, compleja, humilde, amable, práctica, dinámica, coherente, capaz, intensa, productiva, machetera, soñadora, indecisa, esquemática, prudente y valiente… ¡sobre todo valiente! ¡Y llegó la hora! has trabajado mucho para ello… ya creciste… te lijaste, te puliste, te enceraste… es tiempo de lucirte, de brillar, de soñar más fuerte y de volar más alto. Es tu día chaparrita, es tu momento perfecto, es tu alto en el camino para un nuevo paso. Córrele a Lincoln Park, sube las escaleras y mira el horizonte! Eso que veas es lo que te espera…¡Te espera la vida! La vida como mecanismo perfecto en el que ni una pieza sobra y ni una pieza falta; donde cada una de ellas está dispuesta en el lugar correcto para cumplir con su función, para cumplir con su propósito… Tú, eres parte fundamental de ese mecanismo perfecto y es por eso que tenemos el orgullo llenito de ti… por tu fuerza, tu coraje… por tus ganas. Pero ganas son las que tenemos de apachurrarte y de cantarte bien fuerte.. quizás hoy no podrá ser, pero la vida, esta vida justa nos permitirá coincidir en el momento perfecto para hacerlo con el mismo amor pero seguramente con más fuerza. ¡Vívelos intenso porque se escapan rápido! Te amo herme… nos veremos pronto

miércoles, 7 de diciembre de 2011

El error de diciembre

El error de diciembre

Pues sí, el error de diciembre pero esta vez el protagonista se afectó a si mismo sin lastimar a México… estuvo bien, al menos para reírnos un rato.

Después de todo lo que se dijo, yo voy llegando a varias conclusiones y dado que este es mi blog pues empezaré con mis barbaridades.

No soy una lectora ejemplar, al día de hoy en mi haber, están:

El Retrato de Dorian Gray, El Perfume, El Hobbit, El Señor de los Anillos, Mal de Amores, Arráncame la Vida, El Amor en los Tiempos del Cólera, Como agua para Chocolate, El Principito, ¿Qué hacer?, El Reflejo de lo Oscuro, Seda, Gandhi, Todo Mafalda, Las Batallas, Juan Salvador Gaviota, El Viejo y el Mar, La Paloma, El Poema del Mio Cid, El Diario de Ana Frank, Drácula, La aventura de Miguel Littín clandestino en Chile, un libro de poesía (que no recuerdo el nombre), Amantes Trágicas de la Historia, Ética para Amador, Nada Nadie, otro libro padrísimo del que tampoco recuerdo ni el nombre ni el autor (de un campo de concentración) y por más que pienso, creo q hasta aquí llegué.

Mis intentos fallidos: Lobo Estepario, Cien años de Soledad, La Marcha del Elefante, Don Quijote de la Mancha, Pedro Páramo y Vivir para contarla.
Doblemente Fallidos porque me dieron miedo: El Evangelio según Jesucristo y Diablo Guardián.

En ruta: Los Miserables

¿Se valen los de auto estima y esas cosas? Yo creo que no, y que bueno porque no recuerdo los títulos.

Tengo en la cabeza dos libros más que según recuerdo estuvieron más o menos buenos pero no recuerdo los nombres en lo absoluto… solo recuerdo que los tomé de la casa un día y me los eché completitos… uno era de un campo de concentración (no era el que ya mencioné) y el otro como un cuento de un niño en navidad. (Aclaro que no eran historietas del selecciones, aunque también las leí)

Me da pena contar los títulos, por eso nomás los menciono. Aunque he de confesar que en mi afán de justificarme estuve a punto de decir que el del Señor de los Anillos vale por tres jajajaja, que pena… omitamos eso último.

Los libros aquí mencionados, en su mayoría me han trascendido y no porque todos hayan marcado mi vida, sino porque terminarlos de leer constituye una pequeña meta alcanzada… uno se siente bien de terminar de leer un libro, te da satisfacción y por eso es casi imposible que no recuerdes un título.

Desde luego que tengo tres libros que marcaron mi vida, no para cambiar mi forma de ser, pero si para tener nuevas visiones y expectativas… el primero y sin dudarlo El Señor de los Anillos… ese libro logró que modificara mis hábitos… llegaba temprano a la escuela solo para poder leerlo, ese libro me hizo ir a la biblioteca no sé cuántas veces para sellarlo y resellarlo, los tres libros los lei de los ejemplares que había en la biblioteca, porque no tenía lana para comprármelos… un libro que me hizo llorar, reir, y empezar a subrayar… aprenderme diálogos de memoria… uno de ellos: ¿Qué haces Gandalf? Estoy mirando para atrás, ¿para que? Para saber que nos viene adelante…

Estoy enamorada de ese libro… muy cañón… creo lo volveré a leer.

Después, Arráncame la vida de la Señora Ángeles Mastreta… si no me equivoco fue otro libro q tope sin querer, era de alguien en casa y yo lo empecé a leer... literal, NO LO SOLTÉ… el nombre de la protagonista Emilia Sauri… WOW! Me impactó muchísimo encontrar a alguien que escribiera de modo tal que se me antojara escribir… si yo escribiera un libro, sería cien por ciento del tipo de Ángeles Mastreta.

El tercero sin duda, El Viejo y el Mar de Ernest M. Hemingway… ese libro es el mejor ejemplo de un libro perfecto, al grado de no tener nada más que decir.

Leer un libro es como ir de viaje, cuando regresas y enseñas las fotos y te preguntan ¿esto donde es? Tu respuesta es inmediata y cero dubitativa… Esto fue en el museo fulano de tal que está en medio de no se qué… antes de llegar ahí me tuve q subir al tren, pero me perdí porque…. Bla bla bla… cada foto de un viaje tiene una historia que contar… pasa igual con un libro… podría sentenciar sin temor a equivocarme que si tienes un libro que marcó tu vida es imposible olvidar el título… ya no digas el nombre del autor.

Insisto, no soy una lectora ejemplar y ayer, con la moda de los libros y las lecturas llegué a buscar que otros libros tenía y cuales me faltaban… encontré tres y los voy a terminar… pero eso no importa; eso es algo para mí que se quedará conmigo sin trascender más allá… la cosa es que yo sí quiero que me gobierne alguien que sea mejor que yo… quiero una persona culta, sencilla, asertiva, con un profundo interés en servir a la patria, quiero un servidor público en la plena extensión de la palabra, quiero a alguien que lea, que sepa, que conozca… quiero alguien con la humildad de mirar para atrás para saber que viene adelante.

No quiero portadas bonitas… ayer encontré un libro q me regalaron que se llama la Historia de Merlin que tenía una portada perfecta, que nomás de verlo se te antojaba leer, pero cuando me lo regalaron y lo intenté, no pude, no me gustó (y ese no lo puse en mis fallidos porque sencillamente no cuenta)… y es que insisito no basta con una buena imagen… el fondo… siempre es el fondo… y como mexicana me pregunto, ¿Qué fondo queremos los mexicanos?

De todo esto al final del día hay algo q me alegra, y es que es la primera vez en no
se cuántos años, que veo el interés que tenemos hoy en las futuras elecciones.

Independientemente del partido o candidato que nos guste… hoy la gente se interesa… se que falta mucho, mucho… se que en estricto sentido somos una nación incipiente… sé que todavía no está pulido el interés del que hablo, porque como dije en mi entrada anterior somos egoístas y muchas veces nos inclinamos por un partido no para que le vaya bien a México sino para que nos vaya bien en lo individual... por eso digo q falta pulirnos, falta pulir el fondo de este México… no basta la portada; sin embargo, el hecho de que la gente sepa quiénes son los aspirantes para gobernar México, me da un halo de esperanza de que algún día seremos verdaderos ciudadanos y que México saldrá adelante, que México será un buen libro que leer, que México será un buen libro para recomendar. No sé … se vale soñar? Yo creo que si, pero también actuar.

Ya de último les comparto, que no pude evitar recordar esta joya de canción... jajaja aqui la letra.

En los libros hallarás (hallarás)
el Tesoro del Saber (del saber)
para ti todo será
si aprendes a leer
Pues son las letras, la clave secreta
que a mundos nuevos te dejan entrar
Hay letras gordas
otras flaquitas
o alargaditas, grandotas, chiquitas
que tienen tres curvas
o son derechitas
también al ponerlas
unas con otras
parecen notas de una canción.

Después de seguir los consejos aquí detallados, y siendo una fanática de la buena ortografía y buena redacción les cuento (ahora si ya de ultimo) que gracias a mis pocas lecturas, aprendí que “o sea” se escribe separado… si si, se escribe separado si lo lees así incluso te daras cuenta del significado… “osea” todo junto refiere a la estructura ósea y básicamente si lo pones sin acento, está mal escrito.